El arte etrusco
El arte etrusco fue una de las influencias más importantes para la gestación del arte romano. Cuando comenzó a desarrollarse la ciudad de Roma, los etruscos estaban asentados en el centro de Italia (Etruria o Toscana). Era el pueblo dominante y su cultura influyó de forma determinante en el mundo romano.
Arquitectura
Los arquitectos etruscos utilizaron el arco (quizás importando de Mesopotamia). Lo desarrollaron y emplearon con maestría generando una arquitectura abovedad que pasó al mundo romano (frente a los modelos adintelados que vimos en Grecia).
Los etruscos también aportaron al arte un modelo de columna: la columna toscana, que se añadió a los modelos griegos y se utilizó en Roma. Es un orden similar al dórico, ambos derivan de la columna cretense y se caracteriza por:
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La basa está formada por plinto y, sobre él, un grueso toro.
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El fuste es liso y sin estrías, se adelgaza en la parte superior, pero sin éntasis.
- El capitel lo forman el equino y el ábaco.
Las ciudades etruscas estaban amuralladas con muros alzados con piedra de gran volumen o, excepcionalmente, de ladrillo. Destacaban las puertas monumentales, especialmente las de Valterra y Nogusto Peguria. Solían estar acodadas para facilitar la defensa.
La ordenación urbana era similar a la romana con una calle principal (cardo) que atraviesa la ciudad de norte a sur, y otra (decumana) orientada de este a oeste. Eran calles anchas, la cardo podía llegar hasta los quince metros en algunas poblaciones. Las ciudades disponían de canales de desagüe al mar o a un río, elemento muy importante para el posterior desarrollo de Roma.
Las casas constaban de un patio central (toscan) al que se abrían todas las habitaciones de la casa. Destacaba una habitación, el tablinum o comedor, con puerta a la calle. Eran construcciones de madera de las que no se conserva ninguna, conocemos su estructura debido a las tumbas que a menudo imitaban en piedra la estructura de la casa.
Culto a los muertos: las tumbas
Una de las características de los etruscos que más influencia tuvo en el arte fue su culto a los muertos. Las tumbas se construía en piedra, pues debían ser eternas, al contrario que la casas que eran de madera. Utilizaron varias tipologías:
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Los túmulos (siglo VIII): una pirámide circular rodeada por una muralla cubierta que creaba un pasillo. Este fue el modelo para los mausoleos de Augusto y Adriano.
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Las tumbas de cámara: imitaban la casa de los vivos, pero en piedra. Ejemplo de este tipo es la tumba de los toros. Estaban decoradas como si se tratase de una casa, con todos los utensilios necesarios. En la tumba de los relieves el ajuar aparece esculpido con yeso en la pared.
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Las tumbas excavadas en la montaña, eran muy costosas y poco habituales.
Desde el siglo IV las tumbas se construyeron en la continuación de las calles decumanas, los romanos recogieron esta idea y levantaron tumbas en las vías de acceso a la ciudad.
Las tumbas fueron también el soporte para las pinturas al fresco, que representaban escenas alegres y vitales. La escultura funeraria también se desarrolló de la mano de este culto a los muertos. Los difuntos se representan recostados en sus sarcófagos o como tapas de los canopes (urnas).
Artes plásticas: escultura y pintura
Tanto las esculturas como la pintura nos muestra un gran interés por el retrato: un retrato realista que busca parecerse al modelo y no idealizarlo. Este realismo pervivió en el mundo romano y se convirtió en una de las claves de su plástica. Las esculturas etruscas no tienen el equilibrio moral ni estético de las griega, manteniendo rasgos arcaicos como la sonrisa (que más que arcaica parece diabólica1) y los ojos almendrados.
El Matrimonio Cerventori es un ejemplo de escultura funeraria. A los rostros de estas esculturas se les ha llamado rostros jónicos: los ojos muy oblicuos, casi achinados, barba puntiaguda y sonrisa que asusta. La Loba Capitolina del siglo V a.C., símbolo de Roma2, es la escultura más representativa de los etruscos. La quimera d’Arezzo3 muestra toda su fiereza y furia al estar herida de muerte.
Las pinturas etruscas más antiguas que conservamos datan de los siglos VII y VI a.C. Las de la Grotta Campana en la ciudad de Veyes, muestras rasgos orientalizantes. Aparecen animales y monstruos de proporciones caprichosas.
La época clásica del arte etrusco fue el siglo VI-V cuando copia la cerámica griega que encontramos en el interior de las tumbas. En los murales aparecen escenas de caza, lucha o banquetes funerarios. Como si se quisiera continuar una vida provechosa tras la muerte. Los hombres aparecen pintados en rojo y las mujeres en blanco. Como ejemplos destacamos: la tumba de los Toros, la de los Leones4 y la Tumba de los Augures, con escenas de lucha entre atletas y entre hombres y perros.
1Quizás para demostrar la fortaleza de su pueblo.
2Aunque las figuras de Rómulo y Remo fueron añadidos posteriores.
3Monstruo imaginario que lucha contra Belerofonte
4Aunque realmente aparecen panteras, animal dionisíaco por excelencia.