Historia del Arte

Escultura griega V: El helenismo

El helenismo fue una etapa de la historia de la civilización griega que se inició tras las conquistas de Alejandro Magno. El arte griego, en especial la escultura, se difunde y recibe nuevas influencias que lo alejan del clasicismo. A lo largo de tres siglos surgió y se consolidó una nueva civilización, en la que se conjugaron elementos griegos, persas y egipcios.

Muchos artistas emigraron de Atenas, con lo que talleres y escuelas se dispersaron surgiendo una gran variedad de estilos. Desapareció el concepto de artista creado por la generación anterior y la mayoría de las obras no estaban firmadas.

Con la expansión de Roma muchos escultores se dedicaron a elaborar copias en serie para las élites del nuevo Imperio. Podríamos hablar de la estética del nuevo rico, que pretendía mostrar su poder o su riqueza adquiriendo obras de arte sin gusto ni criterio.

Los ideales de belleza cambiaron, aparecen nuevos conceptos estéticos como el costumbrismo (gusto por las escenas comunes) y el gusto por los elementos no necesariamente bellos. Características presentes en el púgil en reposo. Se perdieron los ideales elevados, los dioses y la mitología pasaron a ser un sugerente repertorio de temas sin más funcionalidad, cada vez se tendió más a temas intrascendentes y anecdóticos. El barroquismo decorativo y compositivo ayuda a romper con los ideales clásicos.

El retrato cobró importancia, con obras de gran realismo, que no buscan la perfección o el idealismo. Entre otros destacan los retratos de Séneca, la Cabeza de Delfos y el retrato de Homero.

  • La escuela Neoática (centrada en Atenas), se dedicaba principalmente a realizar copias para los romanos. En sus obras originales utilizaban una técnica ecléctica, mezclando diferentes estilos. Nos dejó obras como el niño de la espina o la Venus de Milo,obra anónima de difícil datación que representa la belleza serena, una idealización de lo real.

  • La escuela de Pérgamo presenta también el eclecticismo de la Neoática, pero se diferencia por mostrar el sentimiento de los personajes (pathos scopásico). Los relieves del Altar de Zeus en Pérgamo, narran la gigantomáquia con escenas de gran violencia. El grupo del Laoconte refleja el dolor de Laoconte condenado a ver morir a sus hijo a manos de unas serpientes que acabarán también con su vida. El galo moribundo conmemora la victoria de Pergamo sobre el pueblo de los Gálatas, se recrea el dolor en los derrotados, pero desde la dignidad de un enemigo valiente.

    Laocoonte y sus hijos
  • La escuela de Rodas elaboró una escultura plena de grandiosidad y barroquismo, con obras espectaculares y complejas. La Victoria de Samotracia en una obra realista y naturalista, imita la proa de los barcos con su postura y lo volado del traje por la fuerza del viento marino. Debió realizarse para conmemorar un triunfo naval. El Toro Farnesio (suplicio de Dirce) narra una historia, la escultura es lo más descriptiva posible. Aparecen personajes anecdóticos, como el pastor y su perro.

  • La escuela de Alejandría, destaca el grupo del Nilo, un paisaje antropomórfico, en el que un personaje masculino simboliza al rio. Dieciséis niños son los dieciséis codos de la crecida del río. La base es todo un friso decorado con la fauna y la flora del río.

2 Comentarios

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *