Historia del Arte,  Materiales de estudio

Apolo y Dafne

Comentario y análisis de la escultura Apolo y Dafne, esculpida por Bernini en el Barroco, actualmente en la Galleria Borghese de Roma

 

Identificación y clasificación

Apolo y Dafne es una escultura exenta, de bulto redondo, obra de Gian Lorenzo Bernini (1598-1680). Está esculpida en mármol blanco de Carrara entre los años 1622 y 1625. Las figuras son de tamaño natural, alcanzado el conjunto una altura de 243 centímetros. La temática de la obra es mitológica, su estilo es barroco y podemos contemplarla en la Galleria Borghese de la ciudad de Roma.

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Análisis

Temática

Ya hemos comentado que se trata de un tema mitológico, un historia recogida en las Metamorfosis de Ovidio. Según el poeta romano, Apolo se burló de Eros; éste, en venganza, le hirió con una flecha de oro, es decir, de amor. El mismo Eros arrojó otra flecha, ésta de plomo, a la driade (ninfa de los árboles) Dafne, por lo que ésta sintió un rechazo hacia Apolo igual de intenso que el enamoramiento del dios del Sol. Apolo persiguió a Dafne y la ninfa, al ver que iba a ser alcanzada, pidió ayuda a su padre, el río Ladón (o Peneo) y a su madre, la diosa Gea. Cuando Apolo tocó a Dafne, la ninfa comenzó a metamorfosearse en un laurel (daphne). El enamorado tuvo que renunciar a su deseo entre lágrimas. El enamoramiento no cejó y Apolo convirtió al laurel en su árbol, tejió un corona con sus ramas que llevó siempre consigo y que convirtió en el signo con el que coronaba a los grandes vencedores fueran poetas, atletas o militares.

Técnica

De Architas – Trabajo propio, CC BY-SA 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=70138441

El artista representa el momento de máxima tensión dramática. El momento en que la ninfa es tocada por el dios Apolo e inicia su transformación en árbol. La elección de este momento permite a Bernini jugar con varios elementos y dotar expresividad, movimiento, textura y teatralidad a la obra.

El momento de la inesperada transformación provoca sentimiento fuertes en los rostros de los personajes. Apolo queda perplejo, mientras el rostro de Dafne muestra el horror ante el terrible momento. Estamos en pleno barroco, pese al clasicismo de Bernini, el pathos de los personajes le conecta con el gusto barroco y, a su vez, con el Helenismo.

La composición también refuerza el momento de tensión. Bernini crea una composición compleja, curva, los cuerpos de los personajes son como arcos en tensión, generando movimiento y dinamismo en el conjunto, y cierta tendencia ascendente al seguir la silueta de Dafne. Aunque existe un punto de vista privilegiado, no sería correcto hablar de unifacialidad, pues al girar alrededor de la escultura podemos ser testigos de la metamorfosis de Dafne, de frente vemos a la ninfa pero si rodeamos a las figuras hasta situarnos tras Apolo contemplamos el árbol en que se está transformado. Un juego de efectos, una teatralidad puramente barroca.

La otra gran posibilidad que permite el momento elegido por Bernini es el juego de texturas. Las figuras, de tamaño natural, aparecen desnudas como corresponde a la escultura mitológica clásica. El trabajo anatómico es impecable. Apolo aparece representado como un joven poco musculado, de belleza adrógina, inspirado en el Apolo del Belvedere. Tanto el cuerpo del dios como el de la ninfa están idealizados, son bellos y muestran un textura lisa, en contraste con las partes del cuerpo de Dafne ya transformadas las ramas de sus brazos y cabellos, y la corteza en que se transforman su piernas; ahí Bernini esculpe texturas rugosas que tienen su continuidad en las rocas que sirven de soporte a la figura.

Para dotar de mayor dramatismo y vida a la obra, el escultor juega a crear espacios de luces y de sombras. Superficies lisas para que resbale la luz y otras rugosas o profundas para generar sombras. Un fantástico juego de claroscuro.

Antecedentes e influencias

Bernini es un escultor barroco entre cuyas influencias debemos destacar la escultura clásica, especialmente la helenística, cuando el movimiento y la expresividad ganaron terreno en el arte griego. Son importantes también las influencias renacentistas con la recuperación de la mitología, el desnudo y la unifacialidad de las obras. La expresividad y el movimiento también le llegaron a través del manierismo. Por su parte la influencia de Bernini será muy importante para los escultores posteriores, especialmente durante el neoclasicismo.

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